Justificaciones sutiles
A mi eso de las razas humanas nunca me cerró… siempre supuse que se trataba de un concepto que permitía, y sigue permitiendo, teorías sociales de orden discriminatorio.
El primero que publicó esta teoría de las razas en el continente europeo, fue un tipo que se llamaba Linneo... sueco creo… no me acuerdo bien… cuestión que el loco empezó catalogando los seres del reino vegetal, se copó y siguió con animales y también fue uno de los primeros en animarse a unir a los animales con los seres humanos… groso para su momento.
En este afán adictivo de catalogar, clasificar, denominar, empezó a separar a los humanos según sus rasgos físicos… los negritos, los blanquitos, los más peluditos, los de ojitos redondos y los otros.
Ahí empezó la cuestión de las “razas humanas”… diferencias físicas percibidas por la vista. De esa teoría comenzaron de desarrollarse las siguientes que justificaban diferencias culturales, materiales, psicológicas y de todo orden según estas categorías físicas.
- “los negritos son más fornidos y vagonetas”
- “los de ojitos estirados son bajitos y tienen comportamientos extraños”
- “los blanquitos somos mas altos, tenemos un pensamiento racional y escribimos libros clasificatorios”
Palabras más, palabras menos esto decía Linneo.
¿Loco, no?
A partir de diferencias físicas, justificamos diferencias culturales, de comportamiento, de dominación.
Pero claro… los blanquitos querían más… necesitaban mas… ¿más qué? más diferencias… más profundas… más justificaciones, obvio.
Y empezaron a hacer teorías súper locas.
“que los climas fríos potencian el desarrollo de la mente”
“que los climas cálidos generan cierto apachorramiento”
Insisto… palabras más… palabras menos.
“que las narices puntiagudas esto y las anchas lo otro”
“que los alimentos que consumen ellos tal cosa y los que comemos nosotros tal otra”
Claro… nuevamente escribían los blanquitos… obvio.
Cuestión que todo esto lo mezclaron con la teoría de la evolución de las especies de Darwin y les surgió un súper combo clasificatorio... eso se llama Darwinismo Social… un hermoso nombre para hermosas justificaciones.
Y fue muy útil esto eeeh. Se justificaron invasiones, matanzas, genocidios, saqueos.
Por nombrar sólo un par: la invasión europea a lo que llamaron América, la matanza de los armenios, sirvió como base del bastión ideológico nazi y muchísimas más.
Incluso cuando se empezó a desarrollar el concepto de la herencia genética resultó tentador aplicarlo a la teoría… y lo hicieron… pero obviamente sin estudios genéticos de por medio… ¡¡¡ no hacía falta… totaaaaaaaal !!! - “mirá si resulta que es al revés” - debieron haber pensado.
Pero claro, quizá resulta fácil ver el racismo en esos casos extremos.
¿Y si miramos un poquito más acá?
“que ese negro de mierda”
“que ese judío avaro”
“que ese chino sucio”
“que ese… que ese… que ese…”
Dudo que Linneo haya imaginado hasta donde podía llegar su sistema clasificatorio… dudo que los europeos del siglo XIX hubiesen imaginado lo interesante que nos terminó resultando a los humanos su Darwinismo Social.
Aunque decir que tooooooodo es culpa de Linneo sería demasiado exagerado y apresurado… a parte estaríamos quitándole crédito a miles de pensadores de todo el mundo que se dedicaron a desarrollar, pulir, mejorar y exponer masivamente sus teorías y neo teorías racistas. Y también sería obviar nuestro crédito por absorber tan metódica y poco críticamente estos conceptos… debemos felicitarnos… somos buenos estudiantes.
http://www.aceprensa.com/art.cgi?articulo=5650
http://www.ugr.es/~pwlac/G10_01Pedro_Gomez_Garcia.html
¿Ves? Tienen sus años estas refutaciones.